Icono del sitio Revista Meta

Crítica: Desearás al hombre de tu hermana

 


28/9/17


Por Natacha Mell


Desearás al hombre de tu hermana de Diego Kaplan en un film que plantea una paradoja, se presenta como un thriller erótico, pero termina resultando una comedia con personajes siempre al borde de la normalidad.
La historia gira en torno a dos hermanas y su madre. Una de las hermanas siente y está conectada con su deseo, mientras que la otra lo reprime y lo rechaza y entre ellas siempre habrá un hombre de por medio. El guión arranca desde la infancia de las protagonistas, su despertar sexual, hasta llegar al día del casamiento de una de ellas, y las inevitables consecuencias.

Ver una película donde trabaje Carolina “Pampita” Ardohain es un gancho publicitario que evidentemente puede funcionar, y con un elenco de importantes actores a nivel internacional, aún más.

El problema fundamental es el guión, ambientada en los años setenta, la época hippie del amor libre, la historia es simple, pero resulta endeble. La línea argumental siempre está en los extremos de la credibilidad, pero eso al no funcionar hacia lo dramático, provoca un clima de comicidad bizarra. Desde que empieza despierta las risas del público. Las situaciones por las que pasan los protagonistas son absurdas y con todos los clichés imaginables. Pero lo que podría ser un defecto, se convierte en una fortaleza. Entrados en el juego, se disfruta de la película. Y nadie queda indiferente.

Ayuda situacionalmente la música, que nos trae éxitos setentosos, y se propone como un atractivo del film. Se luce cantando Mónica Antonópulos composiciones como Tómame o déjame, de una manera muy personal y correcta.
Entre los actores, Pampita y Antonópulos como las hermanas Ofelia y Lucía, están correctas, y sobresale Andrea Frigerio, en su papel de madre, con una performance que da un tono de comedia a su impecable composición. Los protagonistas masculinos que lucen sus trabajadas figuras, tienen dispares actuaciones. Guilherme Winter, brasileño que supo componer a Moisés en la serie televisiva, tiene un encantador rol que juega con la picardía de mezclar su pronunciación castellana con el lunfardo porteño; pero Juan Sorini, no logra que su personaje trasmita la sensualidad y credibilidad que son necesarios para que funcione.

Por todo lo dicho, sumando el elemento del erotismo, que está muy presente en esta película, aunque de una manera sui generis, y la comicidad que provocan las hilarantes situaciones que se plantean, se puede pasar un buen momento disfrutando sin esperar demasiado. Los que busquen un thriller, abstenerse.

5 de 10


Salir de la versión móvil