Por Bianca Cacia
En «Priscilla» Sofia Coppola ofrece una mirada femenina intensa, inquitante e íntima a la vida de Priscilla Presley, sumergiéndonos en su compleja relación con el ícono del rock ‘n’ roll, Elvis Presley.
Basada en las memorias ‘Elvis and Me’, escritas por la propia Priscilla Presley, publicadas en 1985 y que relatan el largo noviazgo y turbulento matrimonio de ambos, desde una base militar alemana donde se conocieron hasta su finca de ensueño en Graceland.
La relación entre ambos fue significativa por varios motivos, uno de ellos, la diferencia de edad; Priscilla con 14 años y Elvis, un hombre de 24. Elvis, consumido por su estatus de superestrella, introduce a Priscilla en un mundo repleto de lujos y oscuridad. La película no escatima al mostrar el consumo de drogas por parte del cantante quien incluye a Priscilla a compartir sus hábitos, estableciendo una relación destructiva, violenta y de total dependencia. Otro «cuento de hadas» como en ‘María Antonieta’ (2006), en donde, ahora, Priscilla es quien está encerrada es una mansión, esperando algo que nunca llega y todo rápidamente se torna en pesadilla.
El retrato de la violencia emocional y física en la relación se convierte en un tema central. Priscilla lucha por mantener su identidad en un mundo donde se espera que
siga los caprichos y deseos de la estrella, el hombre, el ídolo. Pero todo es maltrato y manipulación. La película muestra cierta lucha interna de Priscilla, para encontrar su voz y su lugar en una relación asfixiante, que, por supuesto estaba destinada a fracasar.
Un film que se atreve a mostrar al ídolo en la intimidad, el lado «b», siempre respetando las memorias del libro. Priscilla, desde muy joven, aniquila todos sus sueños y la actriz, Cailee Spaeny, compone una actuación superlativa que lo muestra de manera sutil.
Jacob Elordi, como Elvis, uno de los actores del momento (famoso por la serie de HBO ‘Euforia’) se luce, sin exagerar, ni imitar. Interpretando al ‘Rey’.
La directora demuestra una vez más su habilidad para capturar la complejidad de los vínculos. No solo dirige, también escribe el guión de esta gran película que, esperemos ver, también recibiendo algunos galardones.
