Por Marcelo Cafferata
Estrenada originalmente en el 2012, “FOREVER YOUNG” vuelve este año en una nueva temporada los días lunes y martes en el teatro “El Picadero”.
Esta comedia musical de origen noruego, que ha sido adaptada exitosamente por el grupo catalán Tricicle y que ya ha sido probada en la adaptación porteña al mando de Daniel Casablanca (uno de los componentes del grupo humorístico “Los Macocos” y componente del elenco original de la imbatible “TocToc” como ese taxista obsesionado por los números), recrea la historia de un grupo de artistas que tuvieron su logrado momento de éxito dentro de la comedia musical y que hoy, año 2050, se encuentran en una residencia geriátrica, viviendo un poco del recuerdo y de sus glorias pasadas.
Si hay algo distintivo y diferente dentro de “FOREVER YOUNG” es el humor corrosivo que atraviesa permanentemente la obra.
Los actores, que se interpretan a sí mismos en ese futuro imaginario, son los primeros en estar dispuestos a parodiarse y reírse de ellos mismos con efectivos gags autorreferenciales, tanto sobre los personajes que han interpretado dentro de sus propias carreras como de ciertas características y rasgos distintivos de sus personalidades.
Es así como jamás se pierde esa pátina de acidez, de humor negro y directo con el que se disparan dardos sobre su propia decadencia, sobre la vejez y la decrepitud.
Y es justamente ese sentido del humor –con mucho de la impronta del humor de Casablanca dentro del texto y de la puesta en escena que se sostiene fuertemente sobre ese punto- lo que salva a “FOREVER YOUNG” de caer en la nostalgia, en el tono depresivo y melancólico que puede rodear una historia de grandes artistas que supieron ser populares y que, ahora, llegan a un momento de ocaso y final de sus vidas.
El elenco impacta por la fuerza que despliega en el escenario y por lo sólido y compacto que se construye como trabajo en equipo. Cada uno tiene un perfecto timing en cada una de sus creaciones y disfrutan tanto sobre el escenario que rápidamente se transmite a la platea.
Hay humor, hay diálogos chispeantes y sobre todo hay un repertorio de las más variadas versiones de clásicos de todos los tiempos que van desde Eurythmics, los Rolling Stones, Los Beatles, Queen, Gloria Gaynor y sobre todo el existoso tema de Alpahville, “Forever Young”, que justamente le da el nombre a la obra.
Además de “Roxanne” “Satisfaction” “Sweet Dreams” “I Will survive” y tantos otros hits que los protagonistas entonan como himnos, es muy acertada la inclusión de un medley con temas del rock nacional donde la platea se sentirá aún más identificada y logra uno de los puntos más altos de la obra.
Planteada en esta temporada con un elenco rotativo, inclusive con la posibilidad de ver al propio Daniel Casablanca convertido en el enfermero de la residencia geriátrica (papel históricamente a cargo de Gimena Riestra), los intérpretes indudablemente conocen cada pliegue de la obra, de sus personajes y hacen que cada situación se disfrute y explote al máximo.
Walter Canella (quien tiene como guiño principal haber formado parte del legendario elenco del “Drácula” de Cibrian) y Martin Ruiz (actualmente en el papel del director de “A Chorus Line” y que ha participado en grandes éxitos como “Chicago” y “Casi Normales”) despliegan un excelente contrapunto cuando se lucen en el juego que se entabla entre sus personajes y tienen, cada uno, su particular momento de lucimiento.
El público se ve inmediatamente identificado con Germán Tripel que soporta las burlas de sus compañeros que lo “estigmatizan” por haber sido uno de los “Mambrú” y que dará lugar a chistes internos que buscan complicidad en la platea. Tripel, quien se ha consagrado a lo largo de una vasta carrera dentro de los musicales, ha participado de las puestas de “Tango Feroz” “Los últimos cinco años” “La Ofi” “Y un dia Nico se fue…” y ha sorprendido notablemente en la puesta de “Hedwig and the angry inch” en un rol diferente que le ha exigido una notable transformación. En este caso, tiene a cargo el personaje más irreverente de la obra, el más escatológico y lo hace con enorme simpatía, talento y un registro vocal impecable e impactante que ya todos conocemos y le pone la cuota rockera a la obra.
Las damas de “FOREVER YOUNG” son Ivana Rossi y Melania Lenoir.
Rossi, participante de las primeras puestas musicales de la talentosa Valeria Ambrosio, brilló en “Ella” el homenaje a Rafaella Carrá, “La Celia” sobre la vida de Celia Gámez -la voz indiscutida de la zarzuela española- y en la reciente “Viva la vida!” sobre las canciones populares de Palito Ortega y otros intérpretes de finales de los sesenta y principios de los setenta. Su composición como esa actriz dramática, algo perdida en su propia memoria, es tan frágil como querible, pero intensa y divertida.
Melania Lenoir demuestra una vez más –si es que acaso haga falta que reafirme todo su talento si alguien no la ha visto en alguna de sus composiciones- que puede ser la dulce princesa Fiona en “Shrek”, la “zarpada” heroína en “The Rocky Horror Show”, la infartante rubia Roxie Hart en “Chicago” (en una memorable puesta junto a Natalia Cociuffo), sus trabajos en “Dos pícaros Sinverguenzas” “La Ofi” o su actual rol protagónico en “El curioso incidente del perro a medianoche”.
No solamente es dueña de una voz perfecta y que se ajusta a varios ritmos y melodías, sino que además se apodera de su personaje y se entrega a una vieja desbocada, grosera, guarra, políticamente incorrecta y se luce con un manejo corporal y un dominio de la escena que arranca los mayores aplausos.
Todo en “FOREVER YOUNG” es una fiesta, porque el elenco básicamente está disfrutando de lo que hace en escena.
Y para cuando con la canción leit motiv del espectáculo nos interpele emocionalmente con “Forever Young / I wanna be forever young / Do you really want to live forever?” los mismos artistas que nos han producido risas y carcajadas nos impulsan emocionalmente a pensar que la vida es una sola, que hay que disfrutar cada momento, que nada es eterno y que frente al paso inexorable del tiempo sólo podemos oponer la alegría, nuestras ganas de vivir y nuestros propios sueños y proyectos.
En ese sentido “FOREVER YOUNG” hace justicia a su propia bandera, la de vivir intensamente cada momento y disfrutarlo como si fuese único.
Días y horarios: Lunes y Martes 20.30
Lugar: Teatro EL PICADERO, Enrique Santos Discépolo 1857, CABA
De: Eric Gedeon
Versión de Paco Mir, Joan García, Carles Sans y Daniel Casablanca
Coreografía: Elizabeth de Chapeaurouge
Escenografía: María Oswald
Vestuario: Héctor Ferreira
Realización de Pelucas: Eliana Costa
Arreglos y dirección musical: Gaby Goldman
Dirección: Daniel Casablanca
