CINE: Crítica de «BRUJA»

Por Damian Aspeleiter


Bruja es un thriller dirigido por Marcelo Cubels, con guion de Matías Caruso que cuenta con las actuaciones de Erica Rivas, Leticia Bredice, Pablo Rago, Rita Cortése y Miranda de la Serna.

La película nos cuenta el drama de Selena, una madre soltera que ha pasado su vida estigmatizada por las acusaciones de brujería y nigromancia que sus vecinos han propagado a lo largo del pequeño pueblo rural en el que vive. El mote de bruja la ha mantenido alejada del pueblo, en su pequeña chacra. Su relación con los habitantes del lugar es de miedo y recelo más por lo que ellos creen saber que por lo que realmente saben. Cuando su hija, Belén, es secuestrada por una organización mafiosa que trafica personas para prostituirlas, Selena debe utilizar sus habilidades para recuperar a su hija y castigar a quienes se atrevieron a lastimar a su familia. Si bien la película  gira en torno a una madre que quiere recuperar  a su hija no se despega nunca del aire onírico con toques paranormales.

Bruja no solo trata de las habilidades de Selena sino tambien del despertar de Belén como adolescente y bruja, aun así no es Sabrina, no hay una romantización de la brujería en la película ya que la transición es traumática.

El personaje antagonista es Marisa, una mujer que fue criada en el ambiente de la prostitución que ha naturalizado el abuso por lo cual es una creyente en ese negocio. Marisa  es mala y acepta esa maldad, su falta total de empatía no salva a su personaje ni por haber sido victima.

En términos de construcción debemos plantearnos cual es el rol de la mujer en la ficción y comprender que encumbrar a mujeres en el rol de poder también significa ganar para la mujer el rol de villana, en este sentido el rol de Leticia Bredice es el de una villana hecha y derecha, mala con todas las letras e implacable. Si, mala porque estamos hablando de brujería, o sea el mal mismo y para enfrentar a ese mal el director nos presenta a algo que podría ser peor. 

Es importante el rol de villana y no de villano porque este también es un campo en el cual la mujer a jugado un rol secundario, mas de espectadora o victima involutaria que de perpetradora, esta película recupera el mal para las mujeres.

Desde este punto de vista,el de enfrentar a dos males Selena tiene mucho del clásico vengador del cine;  si bien no es un mercenario retirado con las manos muy manchadas de sangre,Selena es una mujer que acumuló  una serie de habilidades y una reputación que piensa utilizar para buscar,encontrar y matar a quienes le secuestraron a su hija. 

Bruja es una película de terror y suspenso que nos plantea un mal contra otro mal peor porque el tipo villano que hace el personaje de Bredice es en términos palpables y reales peor.
Podría plantearse este film dentro del género de venganza o de terror psicológico  pero su estética es la del terror costumbrista asiático y se emparenta más con «el extraño» y con el terror italiano de los años setenta que con el trhiller y terror que producen los grandes mercados, esto es un acierto ya que la falta de presupuesto se cubre con atmósfera y cierta estética grotesca. El director toma un par de decisiones sobre la narración y evita los baches. El relato es lento y melodramático por momentos pero ese melodrama aporta lo mejor de la película: las actuaciones.

6 de 10


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