Se estrenó en el Teatro Ópera la obra The Old Woman, con la dirección de Robert Wilson y las espectaculares actuaciones de Mikhail Baryshnikov y Willem Dafoe.
Fotos: Fer Casals
The Old Woman es una obra basada en un relato homónimo del ruso Daniil Kharms, adaptado por Darryl Pinckney. Son doce actos y un epílogo. La obra trata sobre… bueno, eso depende… No es lineal, es un laberinto circular en donde tal vez vemos la mente bloqueada del escritor, atrapada dentro de una historia absurda, combinada de una locura deliciosa.
Dijo Bertolt Brecht “Si la gente quiere ver sólo las cosas que pueden entender, no tendrían que ir al teatro: tendrían que ir al baño”. Baryshnikov y Dafoe representan disímiles aspectos de una misma personalidad. Tal vez Dafoe es el más oscuro. Tal vez.
La escenografía recuerda a los espectadores el mundo de Tim Burton, una creación visual mágica mezclada con el expresionismo alemán. Los actores hablan en idioma inglés y ruso, y en pantallas led, traducen lo expresado. La obra repite intencionalmente diálogos a lo largo de todo el espectáculo, logrando “enloquecer” al espectador, pero todo tiene su porqué y se disfruta.
Investigar antes de ver la obra, sobre el escritor y demás detalles, pueden hacer que el público ate algunos cabos que quedarán sueltos. Pero todo está permitido en esta historia. Todo. Un reloj con una mano, una mujer muerta, una dentadura postiza, un bosque extraño…
Es fascinante ver con la fluidez que se desenvuelven ambos actores, amando el escenario, con sus rostros pintados de blanco, y mostrando personajes que hipnotizan al público, deleitándolos por completo. “Piensen en las parejas inmortales de la comedia: Laurel y Hardy, Hope y Crosby. Ahora agreguen a esa lista a Baryshnikov y Dafoe”, señaló The New York Times El de Mikhail Baryshnikov y Willem Dafoe es un dúo que seguramente quedará en la historia. –Valeria Massimino
La visión surrealista de Robert Wilson de la novela de 1939 del ruso Kharms encuentra su expresión definitiva en la superlativa actuación complementaria del dúo Dafoe/Baryshnikov (que en realidad es uno) y en una puesta perfecta desde lo técnico/visual. La historia adaptada por Darryl Pinckney nos sumerge en la imaginación y proceso creativo de un escritor que combate la hoja en blanco desde su obsesión por la omnipresente señora mayor del titulo. Rutinas de voudeville, espíritu circense, humor físico y avant-garde en un guión que reitera frases hasta la exasperación alienando al espectador que se pierde sin remedio en la pesadilla efímera y absurda de una puesta en escena que recuerda a una moderna instalación de centro cultural probando en el proceso que no siempre el teatro necesita de coherencia narrativa para involucrar a su audiencia. –Fer Casals
[…] “The Old Woman”, descomunal obra en la que trabajaron con Baryshnikov (y Willem Dafoe) pudo verse en esta ciudad hace unos años. Ver reseña AQUI. […]